Pero el sistema esta  viciado desde arriba y desde abajo. 
Asi se ha formado la La Plataforma Cívica por la Independencia Judicial, que reúne a jueces, fiscales, abogados, catedráticos, notarios y otros juristas, ha denunciado ante la ONU la reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por su "fuerte politización", así como la falta de recursos que el Gobierno proporciona a los tribunales para investigar la corrupción.
   El grupo de juristas ha llevado a Naciones Unidas el polémico modelo 
instaurado en el órgano de gobierno de los jueces y el "bochornoso 
espectáculo" que experimentó la elección de sus vocales. A su entender, 
el sistema afecta a la independencia judicial y al principio de 
separación de poderes.
   Además, ha informado de la "alta tasa de litigiosidad" registrada en la Justicia española, "inmersa en infinidad de causas
 por corrupción que afectan a grupos políticos, sindicatos, entidades financieras y grandes empresas".
   En su opinión, esta insuficiencia de recursos genera "sensación de 
impunidad" y hace imposible fijar la fecha de juicio en un plazo 
razonable. "Casi todos los jueces que investigan casos de corrupción han
 sido denunciados o sometidos a una inspección", ha añadido.
   La denuncia,  ha trasladado a la ONU la preocupación por la 
"dependencia política" del fiscal general del Estado y la "fuerte" 
dependencia jerárquica de los representantes del Ministerio Público.
   Con todo, el escrito se ha centrado en el nuevo modelo del Consejo 
del Poder Judicial, recordando cómo el Partido Popular incumplió su 
propia promesa electoral, "defraudando" a los electores y chocando 
contra el espíritu de la Constitución y el mandato del
 Tribunal Constitucional.
   Ha 
censurado la intervención "directa e impropia" de los dos grandes 
partidos en la elección de los consejeros, quienes, en su inmensa 
mayoría, tienen "vínculos directos e indirectos" con el poder 
legislativo y ejecutivo. En este sentido, ha criticado que ningún vocal 
judicial pertenece a la categoría de juez y además se desconocen las 
cualidades de los juristas de reconocido prestigio.
   Dicho esto, ha expuesto que el presidente del CGPJ fue 
"preseleccionado e impuesto de antemano" por los dos principales 
partidos, sin necesidad de competir en una amplia terna de candidatos ni
 que fuera valorada su idoneidad.
  
 "Es una persona de confianza del Gobierno, ha prestado ocho años cargos
 de confianza para el partido que finalmete lo ha elegido y pone en 
entredicho la imagen de independencia e imparcialidad
 de la Justicia española en un momento en el que deben juzgarse 
importantes casos de corrupción del partido que sustenga al Gobierno y a
 la oposición", ha agregado.
   
Asimismo, ha advertido de los conflictos de intereses que puede generar 
la compatibilidad de los vocales con el ejercicio de su profesión o la 
función jurisdiccional y ha puesto en evidencia que centenares de cargos
 judiciales son designados discrecionalmente, como miembros y 
presidentes de Sala del Tribunal Supremo, de tribunales regionales y de 
la Audiencia Nacional.
   "Junto al 'revolving door' --puertas giratorias-- están propiciando 
una fractura de la Carrera Judicial. La Carrera está dividida por una 
línea horizontal imaginaria, pero perceptible, que funciona como un 
techo de cristal, entre los de arriba y los de abajo, originando 
insatisfacción y desmotivación en los jueces que se ven relegados
 de alcanzar puestos más altos por más que sea su dedicación y empeño en
 el recto ejercicio de sus funciones jurisdiccionales",  
   "Cuanto más arriba se esté, menor carga de trabajo, menor presión 
inspectora y mejores condiciones de trabajo, con mayores retribuciones y
 ayudas, planes de refuerzo, asistentes, letrados, etc", expone para 
concluir que la independencia del órgano de gobierno de los jueces no 
deja de ser un "disfraz".